¿Violencia gratuita?

Nos encontramos hoy con niños de 10 años y en muchas ocasiones aún menores, convertidos en dueños de ordenadores que en muchas ocasiones no pertenecen ni a sus padres, sino a algún tío, primo o abuelo al que van a visitar
Nos encontramos hoy con niños de 10 años y en muchas ocasiones aún menores, convertidos en dueños de ordenadores que en muchas ocasiones no pertenecen ni a sus padres, sino a algún tío, primo o abuelo al que van a visitar